En el reparto de papeles de esta tragicomedia mal llamada vida, me ha tocado el de «cronopio». No sé si es el mejor o el peor, pero me gusta, así que me aplico en representarlo de la manera más divertida posible.

Me gusta el jazz, la música brasileña, la fotografía y el buen cine. Y, claro, siempre, un buen libro.

Deja un comentario